Es un producto específicamente formulado para ser aplicado en nuevas superficies interiores de yeso, mampostería, hormigón, ladrillo, cemento o fibrocemento entre otras superficies. Este producto evita la absorción irregular de las superficies, al mismo tiempo de incrementar el rendimiento de la pintura.
Suele presentarse en su envase como un líquido concentrado para ser diluido en agua para ser aplicado, típicamente 1 parte de sellador por 3 partes de agua. Su aplicación se realiza con brocha, rodillo o soplete y su acabado es transparente y mate. El uso de este material es muy útil en todo tipo de superficies interiores nuevas, como las mencionadas previamente, para la perfecta adherencia de la pintura o en zonas con pinturas anteriores.