es la acción de preparar una superficie con cera para el embellecimiento y protección. Se realiza sobre distintas superficies, como suelos de distintos materiales, madera, muebles o carrocería, pero el procedimiento es el mismo.
La base debe prepararse a través de lijado y posterior limpieza. El producto se extiende con la ayuda de un algodón o un cepillo suave y se deja secar durante 15 minutos. Próximo, frota en una dirección circular para pulir y dar brillo con la ayuda de un paño de algodón que no suelte pelusa o un cepillo de cerdas naturales.