La transición entre pisos no siempre y en toda circunstancia se efectúa con exactamente el mismo material. Para dar continuidad al pavimento se usan diferentes géneros de perfiles, que esconden las juntas. Mas en ocasiones sucede que los pisos de una habitación y otra no están al mismo nivel. Por poner un ejemplo entre un suelo de porcelana y un suelo de madera o laminado. El desnivel entre las dos plantas se solventa con un perfil inclinado, que evita pequeños peldaños y la posibilidad de tropezar. Estos perfiles acostumbran a estar fabricados en MDF, melamina, aglomerado y lámina o metal. Y con diferentes tonalidades e imitaciones de madera o metal, a escoger conforme el gusto y los colores y materiales del suelo.