Es un tratamiento transparente para proteger de las manchas del salitre o la aparición de moho en soportes porosos como cemento, hormigón o barro. Se puede aplicar tanto en vertical como en horizontal. No crea capa, por eso no se agrieta ni se descascarilla, y no modifica el color ni el aspecto del soporte donde lo apliques.
Su funcionamiento es muy fácil, puesto que se trata de saturar el poro. Después de limpiar previamente los medios, se debe aplicar una capa generosa con brocha o rodillo, dejándolo secar durante unas ocho horas. En los casos en que el soporte nunca haya sido tratado, será necesario aplicar una segunda capa. El rendimiento puede variar mucho en función de la porosidad del material, aún cuando regularmente rondará los 1-1,5 m² por litro.