Es un estructura metálica en forma de prisma rectangular. La pared trasera dispone de una abertura que posibilita introducir el programador de riego una vez conectado al grifo, así como varios agujeros para atornillar el mueble a la pared. En la base tiene un orificio por el que sale el tubo de polietileno para el riego. La pared frontal está compuesta por una puerta batiente con cerradura.
Se utiliza para proteger el controlador de riego. De esta manera se evita su deterioro por el sol y no le entra agua, lo que puede dañar las baterías y, en consecuencia, el programador. Al mismo tiempo, al estar bajo llave, es difícil que otras personas lo manipulen o roben.