Es un pieza prefabricada de yeso que se pueden hallar en diferentes tamaños. El más habitual es el 60×60, si bien los hay de 100×60 o 120×60. La mayor parte de estas placas van acompañadas de un juego de guías que actúan como soporte.
Se emplean para hacer falsos techos o techo, dejando una separación con el techo original generalmente para pasar instalaciones de agua o electricidad.
Estos techos pueden ser continuos, cuando son absolutamente llanos sin acceso al interior, o practicables, en los que se puede acceder al interior en el caso de tener que hacer algún mantenimiento. La manera de instalación va a depender del género de placa que escojas, en la mayor parte de los casos guías de metal van a ir para hacer la estructura y después poner los platos. Otra forma de instalación es con placas de yeso para techos continuos, que se montarían con yeso, esparto y alambre.