superficie de cocción que calienta de manera directa el recipiente puesto sobre él a través de un campo electromagnético. Se fabrica en diferentes colores, como blanco, negro o gris, y tamaños, desde dos hasta seis zonas. Dispone de diferentes funciones, como booster o potencia extra, temporizador o bloqueo para pequeños, como zonas de cocción individuales o flexibles. Se puede mezclar: Placa de inducción/placa gas o vitrocerámica/inducción.
Cocina más veloz que la vitrocerámica, lo que supone un ahorro energético. Advierte el contenedor, por lo que si se retira, la plaga se apaga de forma automática. Evita restos quemados pues no calienta lo que hay entre el plato y el recipiente. Para su funcionamiento es preciso que la base de la batería de cocina tiene un compuesto ferromagnético. Los artículos de aluminio, arcilla, porcelana, vidrio o cobre no son convenientes.