Es una herramienta eléctrica de pequeño formato, con un mango recto para sostener y un disco de corte en su extremo. Se conecta a la red eléctrica con un cable y se enciende a través de un interruptor. En la parte de arriba de la hoja hay un protector de seguridad que, cuando se apoya en una superficie, deja muescas. El disco se sustituye quitando un tornillo con un destornillador.
Al conectar la máquina, la sierra vira a gran velocidad, por lo que hace un corte limpio y preciso. Se emplea en materiales como madera, plástico, fibra de vidrio, láminas metalizadas o cartón. Efectúa incisiones rectas y curvas conforme avanza la mano y penetra en el material un máximo de cuatro o cinco mm. Se emplea para efectuar maquetas en modelismo, marquetería y proyectos de pequeña escala.