Es la acción de proveer un líquido penetrante a un objeto determinado con la pretensión de hacerlo más escurridizo y reducir su fricción. Con esto, asimismo es factible adecentar la suciedad que se genera en su interior y alargar el mantenimiento.
La lubricación se utiliza para aflojar los mecanismos que han sido bloqueados. Al mismo tiempo de esto, favorece que el movimiento de ítems como cerraduras, tuercas, mecanismos de deslizamiento, cadenas o ejes sea más fluido.