la leña es madera que procede de árboles como el roble, el pino, la encina, el alcornoque, el naranjo o el fresno, y regularmente tiene forma de leño o tronco.
Usó como comburente para estufas, chimeneas, estufas u hornos. Cuanto más espesa es la madera de la leña, más tiempo tarda en arder. Se aconseja que la leña esté siempre y en todo momento seco, protegido de la lluvia o la humedad puesto que si se quema húmedo o con mucha resina se generan más restos que se depositan en los cilindros de evacuación de humos. La combustión de la madera genera dióxido de carbono y vapor. El resto de la combustión son las cenizas.