Es un almohadilla de fibra de acero. Dispone de una numeración que cambia dependiendo del ancho del hilo y que va desde el cuatro, el más ancho, hasta el cero, el más fino.
Se emplea para trabajos de bricolaje y carpintería, puesto que alisa, gasta y pule objetos de madera y metal. Los más gruesos se emplean para raspar, decapar y desparafinar superficies de madera, al tiempo que los más finos se emplean para suavizar el tacto del barniz, abrir los poros para regresar a embarnizar o encerar, y pulimentar y abrillantar metales y mármol.