Es un cuerda elástica de PVC. Los extremos están firmemente anclados en un terminal de plástico por medio de un nudo, de manera que se forma un lazo.
Solía hacerlo fijar la cubierta de invierno en piscinas enterradas. El terminal de plástico se introduce en los ojales u ojales de la tapa y el lazo rodea el tornillo que se fija en la piedra de remate. De esta manera, la cubierta queda extendida y tensa. Al mismo tiempo de evitar que el agua se ensucie, evita que animales o niños caigan accidentalmente en ella.