Es un herramienta, realizado con ítems de plástico y metal, con motor en su interior. Su forma es equivalente a la de los taladros. En uno de sus extremos está provisto de una punta regulable, y en el extremo opuesto de un gatillo para accionarlo y una empuñadura. Debajo de ella se inserta una batería que le proporciona corriente puesto que funciona sin cables conectados a la red eléctrica.
Se utiliza para apretar o aflojar tornillos y otros ítems. Su uso es muy común en el campo de la carpintería, para la fabricación de muebles.
Para utilizarlo se deben ajustar los números del cabezal, de esta forma la herramienta no gira sobre sí misma y se evita la torsión de la muñeca.
Además se puede usar como taladro, colocando el destornillador en posición taladro.