es un sistema de calefacción proporciona calor en un circuito de radiador y que asimismo puede administrar agua caliente sanitaria. Es capaz de calentar superficies de hasta 600m² y cuenta con una enorme autonomía. Es eficaz y respetuoso con el medioambiente dado que marcha desde pellets, un biocombustible de baja emisión de CO2 formado por virutas, aserrín y astillas, ítems prensados y restos de poda.
Cada caldera de pellets utiliza un depósito o tolva para guardar el pellet. Hay calderas con depósitos de entre cuarenta y cuatrocientos cincuenta litros. Está ubicado al lado de la cámara de combustión y el pellet es transportado hasta ella por medio de un tornillo sinfín automáticamente, conforme la programación de la caldera.
A través de la restauración del calor emitido en la combustión y a través de el propio intercambiador de la caldera, logra trasladar esa temperatura al circuito de calefacción. El mantenimiento es mínimo dado que solo precisa ser reponer el pellet que se consume y adecentar periódicamente la cámara de combustión con un aspirador de cenizas. Se aconseja efectuar esta limpieza cuando menos una vez a la semana.